Al aumentar la superficie cultivada de 1,3 a 45,9 millones de hectáreas, Brasil podría ampliar aún más su ventaja sobre Estados Unidos. En Estados Unidos, la cosecha de soja ya habrá terminado a finales de 2023. Allí se cosecharon unos 113,3 millones de toneladas, unos 2,9 millones de toneladas menos que el año anterior.
En Argentina, el tercer productor mundial, se espera una trilla significativamente mayor que en el año anterior, históricamente débil. Según un estudio de Agrarmarkt Informations-Gesellschaft (mbH), la cosecha aquí se duplicará respecto al año anterior hasta alcanzar los 50 millones de toneladas. Además de los rendimientos significativamente mayores, también influye la ampliación de la superficie cultivada. En China, por otra parte, la última estimación del Departamento de Agricultura de Estados Unidos espera 20,8 millones de toneladas, unas 556.000 toneladas más que el año pasado.
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